Los animales que matan en las calles se convierten en una amenaza para salud
SANTO DOMINGO. Las autoridades nacionales y municipales del Gran Santo Domingo carecen de un plan para retirar, incinerar o enterrar los perros, gatos y otros animales que mueren atropellados por vehĂculos en calles, avenidas y carreteras.
A diario, los vehĂculos embisten animales en las vĂas pĂşblicas y la mayorĂa mueren en el lugar del accidente. Otros quedan gravemente heridos, no son rescatados por ninguna autoridad y mueren lentamente ante la mirada de conductores.
Es comĂşn encontrar perros y gatos muertos en las principales calles y avenidas de la ciudad que son atropellados, principalmente en horas de la madrugada.
Los cadáveres permanecen en la vĂa por semanas hasta descomponerse y otros se hacen añicos con el paso constante de los neumáticos hasta dejar una capa seca.
Las escenas en las vĂas son desagradables a la vista de todos y el olor nauseabundo, lo que constituye un problema de salud.
Desde los Ministerios de Salud PĂşblica y Medio Ambiente no existe un departamento que se encargue de recoger los animales muertos en las calles y tampoco en los cabildos del Gran Santo Domingo.
El doctor Roberto Peguero, encargado de la DirecciĂłn de Salud Ambiental, explica que el tema es de responsabilidad compartida con Medio Ambiente y los ayuntamientos, pero que estos Ăşltimos son los que tienen la responsabilidad de retirar los animales muertos.
“Eso viene a convertirse en desechos de tipo orgánico, desechos productos de restos animales entonces eso... el ayuntamiento tiene que disponer de eso para que vayan a un destino que n o afecten la salud de la poblaciĂłn”.
AfirmĂł que es un problema que impacta en el medio ambiente y la salud y cuando los cabildos no hagan su trabajo, entonces hay que intervenir cuando se de una situaciĂłn que pueda afectar la salud.
Un mal tratamiento
Por lo regular, cuando los animales son atropellados en los barrios y residenciales o mueren por enfermedad, la gente acostumbra echarlos en sacos y fundas y son depositados en los camiones de basura que los llevan hasta el vertedero.
SerĂan los departamentos de aseo urbano de cada cabildo los que tendrĂan la responsabilidad primaria de retirar los animales muertos de las calles, pero muy pocos lo hacen e incluso no tienen esa tarea asignada en sus deberes.
En sentido general, no existe un depósito final de los cadáveres de animales ni un lugar de incineración para evitar la propagación de enfermedades. Si existen esos servicios, pero en el sector privado.
“Eso pudiera ser un medio donde podrĂan tener los depĂłsitos finales para convertirlos en inerte, es decir que no produzcan ningĂşn daños a la salud”, sostuvo.
El cabildo del Distrito Nacional, a travĂ©s de su departamento de veterinaria que recibe denuncias de la ciudadanĂa y recoge los animales. Hay encargo en las tres circunscripciones, juntas de vecinos.
Por lo regular los cadáveres son depositados con los desechos sĂłlidos que se recogen en la ciudad en la estaciĂłn de transferencia de Villas AgrĂcolas. No existe un plan de incineraciĂłn
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