Santiago.-Las autoridades del hospital regional José María Cabral y Báez no descartan nuevos sometimientos de posibles implicados por la sustracción de medicamentos.
En tanto, que familiares de Solángel Taveras García y hasta empleados del centro hospitalario marcharon y luego se concentraron en vigilia frente al centro de salud para denunciar una trama para condenar a la destituida gerente de farmacia.
La pasada semana, un juez de atención permanente impuso prisión preventiva contra Taveras García y Francisca Isabel Ramírez, pero dejaron fuera a Jennifer Toribio y según uno de los abogados de las implicadas, se debe a su parentesco con una funcionaria de alto rango en el gobierno.
Celeste García, y Edilio García, madre y abogado de Solángel, dicen que a pesar de que su pariente venía denunciando la desaparición de dichos medicamentos, las autoridades no hicieron caso. Edilio García refiere que uno de los medicamentos sustraídos, solo se vende en clínicas.
Los medicamentos sustraídos están 288 unidades de Sevoflurano, utilizado como anestésico y cada una adquiridas a Promese a un costo de 4,950 pesos. A nivel global es de un millón 425 mil 600. También reportaron la sustracción de Gammaglobulina y otros medicamentos.
El abogado Artemio Álvarez en representación del centro hospitalario durante una rueda de prensa donde estuvo el director Ernesto Rodríguez, acusó a los medios de comunicación de tergiversar informaciones sobre el hecho.
Al establecer la responsabilidad de las dos imputadas, también pidió que sea aclarado el caso de una ex empleada que está residiendo en los Estados Unidos, y que de forma extraña le facilitaban hasta dos vacaciones anualmente, debido a que pudiera tener cierta conexión.
El abogado del hospital no descarta tampoco que los medicamentos sustraídos sean utilizados para un tipo de droga que es vendida en el mercado. El director del centro de salud, Ernesto Rodríguez, dijo que no aceptarán que se cometan hechos dolosos y que queden impunes.
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